Revista Digital de la Unidad Académica de Docencia Superior,
Universidad Autónoma de Zacatecas, ISSN: 2594-0449.
Rodríguez González, Josefina y de Lara Correa, José Luis. (2016). Las representaciones sociales de la educación física en alumnos de preparatoria. Revista Digital FILHA. [en línea]. Julio 2016. Número 14. Publicación semestral. Zacatecas: Universidad Autónoma de Zacatecas. Disponible en: www.filha.com.mx. ISSN: 1870-5553.
Josefina Rodríguez Gozález es profesora-investigadora en la Unidad Académica de Física de la Universidad Autónoma de Zacatecas, Maestra en Ciencias de la Educación por la UAZ, Doctora en Ciencias Sociales y Humanidades por la Universidad Autónoma de Aguascalientes. Correo electrónico: rojo@fisica.uaz.edu.mx
José Luis De Lara Correa es profesor-investigador en la Unidad Académica Preparatoria de la Universidad Autónoma de Zacatecas y Maestro en Ciencias de la Educación por la Universidad Autónoma de Zacatecas. Correo electrónico: jldlarac@hotmail.com
Resumen: El objetivo de este artículo es describir las representaciones sociales que tienen los alumnos de la Preparatoria No.2 de la Universidad Autónoma de Zacatecas en torno a la Educación Física. Se abordan las influencias teóricas de Serge Moscovici (1993) como base para explicar el fenómeno, por hacer referencia a un tipo específico de conocimiento, que deja ver sobre qué sabe la gente, qué significado tiene, qué cree, qué opina, qué siente y cómo se comporta en su quehacer cotidiano ante algo o alguien. El procedimiento metodológico fue de tipo cualitativo, mediante un cuestionario centrado en tres apartados que se complementan entre sí. Como resultados se detalla la conceptualización que tienen los alumnos de la Educación Física, la valoración social que le otorgan a la misma y la actitud que muestran hacia la materia.
Palabras clave: Representaciones sociales, actitudes, práctica docente, educación física.
Abstract: The aim of this article is to describe the social representations that have No.2 High School students of the Autonomous University of Zacatecas about Physical Education. Theoretical influences of Serge Moscovici (1993) as a basis to explain the phenomenon addressed, refering to a specific type of knowledge, which reveals what people know, what does it mean, what do they believe, what do they judge, what do they feel and how do they behave in their daily work in front of something or someone. The methodological approach was qualitative, through a questionnarie that focus on three sections which complement each other. The results are shown as the idea students have about Physical Education, the social value they attach to it and the attitude they show towards it.
Keywords: Social representations, attitudes, teaching practice, physical education.
Esta investigación surgió a partir de dos particularidades presenciadas en la práctica docente, la primera, escuchar a los alumnos en lo general referirse hacia la Educación Física (EF) con ideas o significados desiguales, la segunda, observar actitudes con tendencias positivas y negativas de los estudiantes hacia la misma. Para poder acercarse y comprender este fenómeno social, fue necesario indagar en estudios que se hayan realizado sobre estos aspectos y de esta manera acceder a los marcos teórico y metodológico apropiados.
De acuerdo a lo escuchado y observado, para los estudiantes en general, la hora de EF es la oportunidad de alejarse de las demás materias, el momento para realizar actividades recreativas y para jugar o practicar su deporte favorito, esto en el mejor de los casos. También se percibe que la EF es para algunos alumnos, una asignatura desagradable, que sólo sirve para divertirse un rato, mientras que para otros es una materia divertida y agradable.
La práctica docente ha permitido observar en ciertos alumnos actitudes negativas hacia la EF, teniendo su génesis de acuerdo a lo escuchado en algunos ellos, a que no son muy habilidosos para el ejercicio y por eso no les gusta; a que algunos padres de familia les inculcan a sus hijos que es irrelevante la práctica de las actividades físico-deportivas en la escuela, que incluso es una pérdida de tiempo; a que algunos profesores de otras asignaturas aluden que su materia resulta más importante que la de EF y finalmente a que algunos docentes propios de la materia no preparan con antelación su clase y terminan improvisando la misma.
En lo referente al comportamiento observado en la práctica docente, algunos alumnos muestran apatía, desánimo e incluso miedo, dando a entender que asisten sólo porque está en el plan de estudios y nada más. Afortunadamente son una minoría, tal vez producto de creencias que se han ido formando a lo largo de su formación académica, que pueden tener influencia en la demostración de actitudes negativas en la clase. Con este tipo de manifestaciones, se estima que no la perciben como una disciplina que les ayudará de manera elemental a lograr su desarrollo integral y por consecuencia mejorar su estado físico.
La Secretaria de Educación Pública (2009) contempla a la Educación Física como una disciplina pedagógica formativa que tiende a desarrollar las facultades físicas, intelectuales y morales, armónicamente en el individuo, estimulando sus habilidades motrices y perceptivas con el fin de mantener en buen funcionamiento órganos y sistemas que darán como resultado la conservación de la salud y el mejoramiento del vigor físico.
En ese sentido, todas las instituciones educativas que estén conscientes de educar de una manera humanista, deben considerar a la EF como un elemento imprescindible en sus planes de estudios, ya que con ella, se favorece la formación integral de los estudiantes. Este concepto integral, era un modelo de la educación que se impartía en Europa, concretamente en Francia y Alemania, se refería a la formación plena de todas las facultades del alumno, es decir, se buscaba generar al mismo tiempo el desarrollo intelectual, físico y moral de los niños, prototipo que fue acogido por las autoridades educativas mexicanas desde el año de 1870 (Bazant, 1993).
Desde el año 2003, la Academia de Cultura Física y Deporte de la preparatoria No. 2 de la UAZ, ha realizado evaluaciones físicas semestre tras semestre a los alumnos que cursan la materia de EF, las que por cierto evidencian resultados desfavorables y poco alentadores desde el punto de vista del desempeño físico de los jóvenes.
Sin embargo, este instrumento de evaluación, no ha considerado diversos elementos que son primordiales en los resultados que pueda obtener un alumno, entre los que se pueden mencionar: el contexto donde se desenvolvió el estudiante en el nivel escolar inmediato anterior, la capacidad del docente que los atendió, el nivel socioeconómico, entre otros, pero independientemente de estos factores, hay otros que no se han tomado en cuenta por parte de los docentes, hasta el momento se han dejado de lado, y estos son, las imágenes, los significados, las opiniones y las valoraciones sociales que los alumnos poseen alrededor de la EF, estos elementos, deben de tener alguna influencia de manera directa en la obtención de buenos o malos resultados en ese tipo de evaluaciones y seguramente una mediación en el comportamiento que muestran los jóvenes hacia esta disciplina.
En ese sentido, este proyecto constituye una oportunidad inmejorable para conocer desde la posición del alumno, no las aptitudes físicas necesarias para tener un buen rendimiento en la clase, ni para buscar talentos deportivos, sino para enterarse, por un lado, cuáles son las nociones, las creencias, las imágenes, las opiniones que han elaborado de acuerdo a su experiencia personal, experiencia escolar y a su interacción con otros grupos de personas los estudiantes de la preparatoria, alrededor de la EF. Por otro lado, este estudio nos dejará indagar el valor que le otorgan a la misma y finalmente, percatarse si esos elementos inciden para bien o para mal en el comportamiento que los alumnos despliegan en el desarrollo de las clases de esta disciplina.
Sin duda alguna, una de las primeras medidas, es la de inculcar hábitos hacia la práctica de actividades físico-deportivas desde edades tempranas, para que se vaya elaborando una imagen positiva hacia ellas, y por consecuencia se conceptualice a la EF como un medio para evitar enfermedades y para mejorar la salud.
En la actualidad, la adopción de un estilo de vida activo es necesario para el desarrollo personal, social y de calidad de vida, de ahí, la importancia de conocer las imágenes y las creencias que los jóvenes tienen sobre la EF constituye un factor ineludible, tanto por su posible influencia en la adherencia a la práctica frecuente de alguna actividad física como por su impacto en la eliminación de estados físicos de riesgo.
Es en la escuela donde se inculcan ambientes favorables para la asimilación de hábitos saludables que repercutan en su vida futura. Desafortunadamente, la preparatoria es el nivel educativo, en dónde probablemente los jóvenes tengan contacto por última vez con esta asignatura y, por lo tanto, la última oportunidad para inculcarles la importancia de esta disciplina, como elemento que contribuye de manera significativa en su desarrollo armónico.
La EF en las preparatorias de la UAZ, tiene poco tiempo de haberse incorporando a su plan de estudio, a pesar de los ya comprobados beneficios en la salud que acarrea en los alumnos. Aunque el trato que se le da es muy desigual comparado con las otras asignatura, en la práctica es la única que combate la inactividad y aleja a los jóvenes de hábitos nocivos para la salud.
Sin embargo, aún y con todas las fortalezas y debilidades que posea la materia y con lo relegado que esté en cualquier plan de estudio, por encima de eso, es necesario y valioso descubrir desde la posición de los alumnos qué valor social concebido tienen de la EF, es decir, descubrir si las habilidades y conocimientos adquiridos trascienden de los espacios deportivos de la escuela o se quedan ahí, explorar si las actividades realizadas durante el semestre dejó algún beneficio en lo personal o fueron ineficaces, comprobar si las actividades físicas realizadas en las clases de EF les favorecen en su quehacer cotidiano.
Conocer estos aspectos nos dará por un lado, la oportunidad de revalidar o transformar conductas docentes que influyan directamente en la elaboración de una imagen hacia la valoración social de la asignatura y por otra parte, modificar si es necesario, contenidos que estén erróneamente encauzados para los fines que se propone la misma.
De ahí, la importancia de inculcar los valores que tiene la EF como parte del currículum, ya que, representa la única oportunidad para la mayoría de los alumnos, que no les gusta realizar las actividades físico-deportivas de involucrase en ellas, es decir, las únicas horas en que los jóvenes hacen ejercicio es en la clase de EF, le otorguen o no valor, le encuentren o no utilidad, ésta representa un medio ideal para inculcar hábitos que trasciendan en una vida saludable. Y aunque sean sólo dos sesiones por semana de sesenta minutos cada una, es ahí, en donde se les brindan herramientas que les ayuden a dejar de lado la inactividad física. Es pues, una disciplina de gran importancia para que los alumnos alcancen un bienestar tanto físico, psicológico y social y de esta manera sean partícipes en la conformación de una sociedad más sana. En este sentido la ONU (2005) plasma lo siguiente:
El deporte y la EF proporcionan igualmente beneficios psicológicos como la disminución de la depresión y el mejoramiento de la concentración. El deporte, la EF, el juego y la recreación, tienen un impacto positivo en la educación del niño. La EF usualmente mejora la habilidad del niño para aprender, aumenta su concentración, su asistencia a clase y su rendimiento en general. Los jóvenes aprenden mejor cuando se divierten y están activos. En las escuelas, la Educación Física es un componente integral de una educación de alta calidad (ONU, 2005).
Con las actividades propias de la EF, los alumnos aprenden a seguir normas, apropiarse de conductas, instituyendo con ello, su personalidad social posterior. Entonces, indagar el porqué de los diferentes sentimientos como alegría o apatía que los alumnos tienen hacia las clases de EF es de suma importancia, debido a que, nos permitirá percibir las creencias, la imagen, el estereotipo y el valor social que tienen ellos fijado alrededor de la materia. Y esto dará pautas a seguir para tratar de contrarrestar en lo posible ese fenómeno.
Así entonces, si los alumnos de la preparatoria No. 2 de la UAZ de acuerdo a su experiencia personal, familiar o académica y a la interacción social que hayan desarrollado, tienen una noción, una imagen, una creencia o un significado sobre la EF, si son capaces de emitir una opinión favorable o desfavorable, si le otorgan una utilidad benéfica o infructuosa y además, si estos elementos dan la pauta para que los alumnos tengan una actitud que deriva en una diversidad de sentimientos con una orientación positiva o negativa hacia la materia, es porque tienen estructurada una representación social alrededor de la misma.
Conocer esas representaciones sociales que de la EF tienen los alumnos nos deja inspeccionar sobre lo que ellos saben, sobre lo que ven, así como lo que perciben y afirman alrededor de esta disciplina, además nos permite explorar sobre lo que ellos creen, con los que están de acuerdo o no y por último, concede escudriñar sobre lo que sienten los jóvenes y por lo tanto, entender el porqué de ciertos comportamientos en torno a la EF.
A partir de los elementos expuestos anteriormente el interés de esta investigación se centra en tres aspectos fundamentales: Conocer qué “concepto” tienen, qué “valoración” le dan y qué “actitudes” manifiestan los alumnos de la preparatoria sobre de la EF.
Como un pilar para el desarrollo de esta investigación, la Teoría de las Representaciones Sociales de Serge Moscovici (1993), fue el referente teórico para la interpretación de la información recabada. Esta teoría permitió tener una aproximación al significado que del objeto social (en este caso la EF), tiene el sujeto social (los alumnos de la preparatoria No. 2).
La teoría de las Representaciones Sociales es una excelente herramienta utilizada tanto en el ámbito de la psicología social como fuera de ésta, debido a que ofrece un encuadre explicativo alrededor de las imágenes, nociones, valoraciones, y actitudes que los individuos forman en su vida cotidiana respecto a un objeto. Las Representaciones Sociales esbozan un planteamiento metodológico atractivo y de gran valor dentro del análisis del sentido común y de lo cotidiano, como una explicación adecuada en el estudio de la construcción social de la realidad.
La gente conoce la realidad que le envuelve mediante explicaciones que desencajan de los procesos de comunicación y del pensamiento social. Las representaciones sociales condensan dichas explicaciones y en consecuencia, hacen referencia a un tipo específico de conocimiento que juega un papel crucial sobre cómo la gente piensa, organiza y se comporta en su quehacer cotidiano, eso es el conocimiento del sentido común.
Por ello es pertinente basarse en esta teoría para tratar de entender cómo los alumnos de la preparatoria No. 2 van edificando imágenes, creencias, valores, opiniones, y actitudes que a través de la interacción social, se manifiestan luego como positivas o negativas, con comportamientos muy diversos, de enfado o alegría, de aceptación o rechazo, todos estos sentimientos alrededor de la EF; y es que, cuando los alumnos hacen alguna referencia de esta materia, la clasifican, la explican y además la evalúan, es porque tienen una representación social de la misma.
Con la teoría de las representaciones sociales el centro de interés se enfoca a lo colectivo y no a lo individual. La utilidad está pues, en la necesidad de comprender lo que instituye un grupo o una sociedad. Ya no interesa indagar a un ente aislado.
Para abordar esta teoría se describen las influencias teóricas que estimularon a Serge Moscovici para la construcción de las Representaciones Sociales, para luego explicar el concepto, las funciones y las dimensiones que integran esta teoría. Con la intención de determinar los elementos esenciales sobre los cuáles se enfocó el trabajo de campo para la recolección de información y así poder conocer la Representación Social que los estudiantes de la preparatoria No. 2 de la UAZ tienen de la EF.
Las influencias teóricas que estimularon a Moscovici a trazar la teoría de las Representaciones Sociales fueron varias: Wilhelm Wundt y la psicología como ciencia experimental; George Herber Mead y el Interaccionismo Simbólico; Emile Durkheim y su concepto de representaciones colectivas; Lucien Lévy-Bruhl y su estudio sobre las funciones mentales en sociedades primitivas; Asimismo, Fritz Heider con sus estudios sobre psicología del sentido común y Berger y Luckmann, con su propuesta de la construcción social de la Realidad (Araya, 2002).
Moscovici incorpora a las sociedades modernas el concepto de Representaciones Sociales, con el propósito de entenderlas como ideas generadas y adquiridas, envolviendo el carácter preestablecido y estático que tenían en la visión clásica. Las representaciones colectivas como las definió Durkheim, pasan a ser sociales; donde lo que prevalece son las interacciones, los procesos de intercambio a partir de los cuales se estructuran dichas representaciones otorgándoles su carácter social.
El concepto de Representaciones Sociales aparece por primera vez en la obra de Moscovici (1979), El psicoanálisis, su imagen y su público donde expone:
La representación social es una modalidad particular del conocimiento, cuya función es la elaboración de los comportamientos y la comunicación entre los individuos. Es un Corpus organizado de conocimientos y una de las actividades psíquicas gracias a las cuales los hombres hacen inteligible la realidad física y social, se integran en un grupo o en una relación cotidiana de intercambios, liberan los poderes de su imaginación (Moscovici, 1979, pp.16 -18, citado por Mora 2002 p. 7).
La representación es una acción psicológica que posee una función simbólica, ya que implícitamente contiene un significado y éste tiene que ver directamente con la situación del sujeto frente al mundo en que vive y con el que se relaciona. Por eso, se considera a la representación como una organización psicológica, una modalidad de conciencia particular.
Esas concepciones que los alumnos adquirieron de la EF en el ámbito académico, familiar e incluso de amistades, lo transmiten para establecer ficciones, estereotipos, creencias y nociones sobre esta disciplina, que luego se convierten en un conocimiento de sentido común, para bien o para mal. Es decir, si para algunos alumnos la EF es simplemente la clase para ir a jugar de manera obligada, esto conduce a que la actitud de esos alumnos pueda ser negativa y por lo tanto, su desempeño no es adecuado. La contraparte sería, si la imagen de la asignatura es buena, la verán como una herramienta que les permite mejorar su salud y para desarrollar destrezas que les ayudarán en su quehacer cotidiano.
La representación es considerada, además, proceso y producto de construcción de la realidad de grupos e individuos en una fase histórica social determinada. Para un grupo de alumnos, la representación de la EF es el lenguaje que estos alumnos elaboran a partir de las relaciones que se establecen con la asignatura y que parten de la experiencia previa, la cual, puede ser propia o ajena.
Según Jodelete (1993) toda representación social posee dos elementos a considerar. Por un lado se define por un contenido (imágenes, opiniones, actitudes, informaciones, creencias etc.), a su vez, este contenido se relaciona con un objeto social (un trabajo a realizar, un acontecimiento económico, un personaje social, etc.). En este caso conocer, las imágenes, las informaciones y las actitudes (contenido) que tienen alrededor de la EF (objeto) los alumnos de la preparatoria.
Las Representaciones Sociales establecen medios cognitivos en los cuales se puede observar y reconocer la presencia de opiniones, creencias, valores y actitudes que en concordancia con esos elementos, pueden tener una tendencia positiva o negativa. Se organizan, a su vez, como sistemas de códigos, principios interpretativos y orientadores de las prácticas que definen la llamada conciencia colectiva, ésta se administra con fuerza normativa en tanto instituye los límites y las posibilidades de la forma en que la sociedad actúa en su cotidianidad.
La construcción de las Representaciones Sociales se da a partir de una serie de aspectos de diversos orígenes. Por un lado, las creencias ampliamente compartidas, los valores considerados como básicos y las referencias históricas y culturales que conforman la memoria colectiva y la identidad de la propia sociedad. Es decir, toda una base cultural acumulada.
Por otro lado, los procesos de comunicación social, en este caso, los medios masivos de comunicación poseen una importancia absoluta para transmitir creencias, valores, conocimientos y modelos de conductas. Tanto los medios que tienen alcance general y los que se dirigen a categorías sociales específicas. Cualesquiera que sean, todos tienen el poder de tener a las personas sometidas a su influencia.
Y el último medio por el cual se construyen las Representaciones Sociales son los mecanismos de la objetivación y el anclaje, procesos básicos de la representación. El primero describe cómo inciden las estructuras sociales sobre la formación de las representaciones sociales y de cómo intervienen los esquemas ya formados en la elaboración de nuevas representaciones. El segundo se refiere a la forma en que lo saberes y las ideas acerca de ciertos objetos sociales entran a formar parte de esas Representaciones a través de una secuencia de transformaciones específicas (Peña, J. y González O. 2008).
Las representaciones sociales cumplen diferentes funciones, de acuerdo con Quiroz (2004) que menciona que tanto las funciones básicas como sociales, se hacen evidentes cuando comprendemos su naturaleza social y son las siguientes:
Funciones básicas |
Funciones sociales |
Interpretar y reconstruir la realidad |
Son un marco de referencia sociocognitivo de interpretación y de reconstrucción de la realidad únicamente |
Crear realidades de sentido común |
Cuando el grupo activa un valor y activa un conocimiento de sentido común al nombrar, clasificar, conceptualizar y valorar los objetos. |
Crear explicaciones y conceptos de la vida cotidiana que permiten la comunicación |
|
Fuente: elaboración propia a partir de las aportaciones de (Quiroz, 2004).
Toda representación social se estructura alrededor de tres elementos básicos: 1. La información que se refiere a la acumulación de conocimientos que tiene la gente de manera organizada en torno a un objeto, acontecimiento o cualquier fenómeno de la naturaleza, 2. El campo de representación que corresponde a la organización de manera ordenada y sobretodo jerarquizada de los elementos que conforman el contenido de la representación. Es decir, constituye el conjunto de imágenes, opiniones, actitudes, creencias y valores presentes en una misma representación social y 3. La actitud como la parte que siempre está presente en toda representación y se refiere a la inclinación o disposición favorable o no que se le da al objeto de la representación. Así entonces, la actitud manifiesta el elemento más afectivo de la representación, al ser la reacción emocional y valorativa que expresan las personas en relación a un objeto social.
Llevar a cabo estudios entorno a la representación de un objeto social, deja reconocer los modos y procesos de constitución del pensamiento social, por medio del cual el alumno construye y es construido por la realidad social. Además de que permite acercase a ese conocimiento de sentido común, el que los alumnos emplean para actuar y tomar posición ante la EF.
Conocer entonces las Representaciones Sociales que de la EF tienen los alumnos de la preparatoria No. 2, brinda la oportunidad de saber lo que sucede alrededor de esta asignatura, saber lo que los alumnos piensan y creen de ésta disciplina, además de que representa también la oportunidad de obtener información desde la posición de los estudiantes, con miras a desarrollar propuestas que permitan no solo aclarar una forma efectiva de articulación de esta disciplina a los planes de estudio, sino también contar con la participación de los diversos actores en el escenario escolar, de tal manera, que el desarrollo de esta disciplina se convierta en un elemento significativo de su cotidianidad.
La metodología, en concordancia con la naturaleza de la investigación, se fundamentó en la Teoría de las Representaciones Sociales. Esta concepción plantea tres elementos constitutivos de toda representación social: El concepto que se relaciona con lo que "yo sé”; la valoración social "lo que creo"; y las actitudes, con lo que "siento", elementos que se tomaron como guía para la obtención de la información y su posterior análisis.
La investigación fue de corte cualitativo. De acuerdo con Vela (2008) los métodos cualitativos, ponen en énfasis en la “visión” de los actores y el análisis contextual en el que ésta se desarrolla, centrándose en el significado de las relaciones sociales. La investigación cualitativa “más que un enfoque de indagación es una estrategia encaminada a generar versiones alternativas o complementarias de la reconstrucción de la realidad” (Vela, 2008, p.64).
La investigación se llevó a cabo en alumnos de la preparatoria No. 2 de la Unidad Académica Preparatoria de la UAZ, ubicada en el campus II, esta escuela forma parte de las trece preparatorias con las que cuenta la Universidad y es la preparatoria con la mayor cantidad de estudiantes del nivel medio superior en el Estado, atendiendo a más de 2,500 alumnos, distribuidos en 80 grupos, divididos en dos turnos, el matutino y el vespertino, la procedencia de los jóvenes es muy variada, así como las condiciones socioeconómicas de los mismos.
Para la selección de los sujetos de estudio se buscó que la participación de los mismos fuera heterogénea, para ello se hizo la invitación a alumnos de la preparatoria que cursaran la asignatura de EF en el semestre agosto – diciembre de 2015, tanto del género femenino como del masculino, considerando a partir de lo observado en la práctica docente, que las mujeres en lo general son las que tienen una menor disposición hacia el deporte en comparación con los hombres. El número total de alumnos que se presentaron a responder el cuestionario fue de 38, de estos, 22 eran mujeres siendo 12 del turno matutino y 10 del vespertino y 16 hombres de los cuales 8 correspondieron al turno matutino y 8 del vespertino.
Como instrumento de recolección de la información se estableció un cuestionario [I] que abordó tres aspectos fundamentales: el “concepto” que tienen los estudiantes de la EF; la “valoración social” (utilidad) que le dan la materia como elementos que contribuye a su formación integral y por último la “actitud” que manifiestan alrededor de la misma. [II]
Para la elaboración del cuestionario se usaron las preguntas de evaluación y abiertas, ya que están dirigidas a obtener del alumno información sobre cómo valora de manera cualitativa la EF (conceptos, imágenes, valores, utilidades y actitudes) y por el otro lado son abiertas por que permite al consultado formular su propia respuesta. El cuestionario constó de 10 preguntas y estuvieron enfocadas a dar respuesta a los objetivos de la investigación, conocer el concepto, la valoración y la actitud que tienen los alumnos de preparatoria No. 2 hacia la EF. Además, se solicitaron los datos generales del informante. Las preguntas fueron abiertas para no coartar a los estudiantes en sus respuestas.
El análisis de la información se realizó filtrado la Información, para ello se transcribieron los datos obtenidos del cuestionario pregunta por pregunta, para obtener las frecuencias más comunes que expresaron los estudiantes sobre la representación social que tienen de la EF.
La aplicación del cuestionario se llevó a cabo en el cubículo de la Academia de Cultura Física y Deporte de la preparatoria No. 2, por ser un lugar agradable y espacioso, debido a que se cuenta con lugares hasta para 20 personas cómodamente sentadas, además de que es un lugar que ubican sin ninguna dificultad los alumnos que cursaron la asignatura de EF. Cualquiera que fuera número de alumnos que se presentara por día, se les explicó de manera puntual, que era una apreciación de la asignatura de EF recién cursada. Se les leyó cada una de las preguntas previo a contestarlas, de manera que si existían dudas en ese momento se despejaban. El cuestionario se aplicó a papel y lápiz, cada uno de los alumnos fue contestando con tranquilidad en un ambiente relajado. El tiempo para contestar fue libre, aun así, en lo general no fueron más de 10 minutos lo que tardaron para terminarlo.
Para la codificación se les asignara una clave de identificación a cada cuestionario, la cual se organizó de la siguiente manera: F si era del género femenino o M si correspondía al masculino, el número correspondiente a los años de edad que registró el alumno, M si es del turno matutino o V si es del vespertino y por último, el número que les correspondió al contestar. Es decir, F16M1 correspondería a Femenina de 16 años del turno Matutino que contestó el cuestionario número 1, o bien, M18V37, Masculino de 18 años del turno Vespertino que contestó el cuestionario correspondiente al número 37. Una vez aplicados los cuestionarios, se pasó a la siguiente fase, para procesar los datos.
Una vez aplicado el instrumento se continuó con el vaciado de la información en tablas mediante hojas de cálculo de Microsoft Office Excel, debido que este programa permite fácilmente manejar la información, además que deja hacer cálculos y graficas de manera práctica y eficiente. Esta información se compiló en tres tablas, una para la información recabada de los datos generales del informante así como de la concepción que tienen de la EF, otra para los datos obtenidos de la valoración social que le dan a la materia y una tercera tabla para registrar la actitud que tienen los alumnos alrededor de la EF.
La redacción de los resultados, se dividió en tres partes, las cuales dejaron dar respuesta a cada uno de los objetivos planteados en la investigación. La primera parte está encaminada a conocer la “concepción” que de la EF a partir de sus imágenes y creencias en dos ámbitos. La segunda estuvo enfocada en examinar “la valoración social” que los estudiantes le confieren a la EF. La tercera y última parte de esta sección, se dedicó a escudriñar las “actitudes” que exteriorizan los estudiantes alrededor de la EF, es decir, conocer los sentimientos y comportamientos de los alumnos al desempeñarse en esta esta materia.
Las percepciones, creencias y visiones que los estudiantes tienen sobre la naturaleza de la EF inciden de cierta manera en su desempeño físico en la disciplina. Con base en las respuestas de los encuestados, se puede afirmar que los alumnos, practiquen o no ejercicio, les guste o no el deporte, perciben a la EF en lo general, como una herramienta, que por medio de la práctica de actividades físicas, deportivas o recreativas les permite obtener un estado de salud apropiado, un mejor rendimiento físico, un mejor cuerpo, salud mental e incluso como una cultura para lograr un mejor estilo de vida.
Los jóvenes perciben a la EF como una herramienta que permite lograr un estado de salud apropiado, esta noción es de suma importancia ya que la tienen incluso alumnos que expresaron no hacer ejercicio. En cuanto al carácter instrumental que se le reconoce a la EF, relativo a la obtención de un mejor rendimiento físico, se percibía como una materia para distraerse, que no se deja de lado la utilidad de la misma para lograr una sensación de bienestar.
Las expresiones presentadas anteriormente, aunque ligeramente diferentes en tanto que unas resaltan beneficios para la salud, otras para el rendimiento físico y otras que no le encuentran ninguna utilidad, tienen el común denominador de representar a la EF desde una mirada objetiva (que se puede percibir por los sentidos), esto es, como un conjunto de concepciones, imágenes y creencias las cuales permanecen en medida en que son útiles para enfrentar problemas de la vida cotidiana (estilos de vida sedentario, sobrepeso, etc.) o desarrollar capacidades físicas para tener un mejor rendimiento en sus actividades cotidianas. De ahí la necesidad de apropiarse de sus virtudes y generosidades, para poder ponerlas en práctica y de esta manera brindar las herramientas necesarias para enfrentar las situaciones cotidianas.
En cuanto a resolver algún problema de salud mediante las actividades físicas propuestas en las clases, se pudo apreciar que los alumnos en lo general, tienen una percepción muy acentuada de que con las clases de EF se puede mejorar la salud, les permite evitar el sobrepeso y por consecuencia la obesidad, otros, incluso, la conciben como un medio para evitar enfermedades, también existen quienes lo tiene confuso, así lo refleja la siguiente expresión; “No lo sé, tal vez sí o tal vez no” (F16M16).
En relación a las habilidades adquiridas en las clases de EF, se pudo apreciar a partir de las expresiones que hacen en lo general los alumnos, que los conocimientos y las habilidades adquiridas en la asignatura de EF sí les ayudan al realizar otras actividades extraescolares sean o no deportivas.
Sobre el cuestionamiento de que las actividades de la EF sólo pueden aprenderse y practicarse en la escuela, los alumnos consideraron que fuera de la escuela se puede aprender y practicar actividades de la EF, incluso hasta en la casa se pueden aprender y practicar, no así, los alumnos que poseen un estilo de vida sedentario, para ellos la escuela es el único lugar donde se puede aprender y realizar actividad física.
En cuanto a sus beneficios obtenidos con las clases EF, las respuestas fueron variadas, en cuanto a la mejora de la salud y el desarrollo de capacidades físicas señalaron que les ayudo a tener una mejor educación y cuerpo, ser más flexibles y tener una buena condición física para hacer ejercicio en cualquier lado y con esto tener buena salud.
También hubo beneficios en el aspecto psicológico, así lo evidencian las siguientes respuestas, señalaron que es un beneficio psicológico, que les permite sentirse bien con ellos mismos. Así mismo se presentaron respuestas que no exhiben ningún beneficio, así lo revela la siguiente: "Como yo todas las tardes tengo entrenamientos, no noté algún beneficio con las clases de EF que hice” (M16M33). Se exteriorizó un beneficio muy peculiar y digno de tomarse en cuenta, así lo evidencia la respuesta del siguiente informante: "Convivir al aire libre alejándome de adicciones" (M16M38); Se evidencia pues, que en lo general, los alumnos sí percibieron un beneficio en su organismo, producto de las clases de EF, esos beneficios fueron de índole fisiológico, de rendimiento físico y psicológico.
Se observó y se verificó que los alumnos que mostraron mayores habilidades motrices para realizar la actividad física, poseen nociones, creencias e informaciones positivas hacia las clases de EF, que los alumnos que mostraron menos habilidades motrices.
Mientras que, para los jóvenes con mayores habilidades no se les complica los ejercicios como lo son diferentes tipo de saltos, rodadas, desplazamientos laterales, correr de espalda, correr entre obstáculos, correr cargando objetos, etc. Los alumnos con menores habilidades se les dificultan esos tipos de ejercicios y sólo se limitan a realizar las actividades básicas, como son una simple caminata, un trote o cualquier ejercicio que no implique cierto grado de dificultad mayor a eso. Se observó también, que los alumnos con habilidades para las actividades físicas, conciben a la EF como divertida, agradable y relajante a diferencia de los alumnos con menores habilidades, los cuales aprecian a la EF como aburrida, cansada y estresante. Cabe señalar que a ambos grupos de alumnos, no les agradan las sesiones teóricas ni las tareas, así se exhibe en la siguiente expresión.
Los alumnos con mayores habilidades poseen emociones más afectivas alrededor de la EF que los alumnos con menores habilidades. Esto significa que si a los alumnos les gustan las clases de esta disciplina, existe una gran probabilidad que ellos tengan un mejor desempeño en dicha disciplina.
De acuerdo a lo observado, las mayores dificultades para la realización de ciertas actividades físicas, las presentaron los alumnos con menores habilidades motrices, esto, no valida que los alumnos habilidosos hagan menos a los que no lo son.
En relación al comportamiento en clase, se observó que los alumnos con mayores habilidades tienen una mejor conducta y por lo tanto un buen desempeño que los que tienen menos habilidades. Los primeros son participativos y tenaces durante la clase, siempre hacen todos ejercicios, si algo se les dificulta lo intentan hasta que lo pueden realizar. En contraparte, los alumnos menos habilidosos, eluden la participación, su trabajo es irregular, ya que dejan los ejercicios a medias, a algunos de ellos les da vergüenza realizar ciertos ejercicios y eso conlleva a que no adquiera habilidades de manera eficiente. En ese sentido, se evidencia un marcado contraste en la forma de actuar de ambos grupos.
Acorde a los sujetos que se estudiaron resultó que cuando a un alumno le gusta la EF su comportamiento es bueno de principio a fin, se esfuerza y es participativo; en cambio a un alumno que no le gusta la materia, su comportamiento no es bueno, procura no esforzarse o si lo hace es por obligación.
Conclusiones
En los estudiantes existe un conglomerado de imágenes, creencias y valoraciones alrededor de la EF, y en reciprocidad con éstos elementos, comportamientos que reflejan una postura hacia la misma. El sistema de conceptualizaciones, ideas y apreciaciones que los alumnos tienen sobre la naturaleza de la EF, tiene su origen en las distintas visiones que se tienen de la misma, en la experiencia personal, en la manera de entenderla y de proyectarla.
Al tiempo que el alumno se despliega en las sesiones de EF, en el círculo de amigos, en la casa o en la escuela, asimila informaciones y experiencias que van edificando poco a poco, conceptos, valores y opiniones en torno a la asignatura. Esas experiencias debe asociarlas a consideraciones sobre su desempeño personal en clase, a su manera de actuar y de comportarse en la misma.
A partir de los resultados obtenidos se considera que si las clases de EF se perciben como agradables, divertidas y sencillas de realizar por los alumnos, esto ayudaría en mucho a cambiar el enfoque que se tiene de dicha disciplina, transformándose de ser una disciplina que se cree que es difícil, aburrida, cansada, sin ninguna utilidad en la vida, que sólo los que tienen mayores habilidades motrices la pueden realizar, a ser una materia agradable, entretenida, interesante y sobre todo con mucha utilidad para distintas actividades que se desarrollan en la cotidianidad.
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[I] La aplicación de cuestionarios como instrumentos de recolección de información es una de las técnicas recomendadas para localizar y revelar los elementos constitutivos de las Representaciones Sociales.
[II] Es preciso señalar que para dar respuesta al tercer componente de las actitudes que es el intencional, es decir, el comportamiento, se basó en la percepción del docente, ya que él, mejor que nadie, sabe cómo se comporta cada estudiante en el desarrollo de la materia. Para ello, durante el semestre se estuvo presente en muchas de las clases de todos los grupos que en el semestre agosto-diciembre de 2015 cursaron la materia.